En cada una de sus obras, desde la elección del local hasta la entrega del emprendimiento, la Real Urbanismo se centra en la calidad de vida de sus clientes y de la comunidad cercana. Para ello, trabaja explorando de la mejor manera la infraestructura del barrio o de la región, el terreno y todos los recursos necesarios en una obra, optimizando los usos y reduciendo impactos.
La preocupación de la Real Urbanismo con la calidad de vida va más allá del cliente, la empresa se preocupa con la familia y la comunidad, trayendo un concepto más global.
¿QUÉ ES CALIDAD DE VIDA Y CÓMO LOS EMPRENDIMIENTOS DE LA REAL URBANISMO CONTRIBUYEN CON EL COTIDIANO DE SUS CLIENTES?
La calidad de vida es un concepto que considera las condiciones básicas y suplementarias en las que viven personas, familias o grupos sociales. Los parámetros utilizados son determinados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que a través de un cuestionario y una metodología científica, es capaz de “sumar puntos” que abarcan salud física y mental, familia, amigos, salud y educación, por ejemplo. El cuestionario de la OMS está formado por preguntas acerca de seis esferas: física, psicológica, nivel de independencia, relaciones sociales, medio ambiente y aspectos religiosos. Además del concepto y de las consideraciones de la OMS, otra forma de medir la calidad de vida de una población es el alto Índice de Desarrollo Humano (IDH). Florianópolis es la tercera ciudad brasileña en IDH y la primera entre las capitales.
La Real Urbanismo considera estos criterios para la estructuración de la calidad de vida, así, sus emprendimientos se construyen con base en los conceptos del Nuevo Urbanismo, que agrega elementos necesarios para el desarrollo de las personas en un radio de 10 km de su vivienda, evitando pérdida de tiempo con desplazamientos y maximizando las inversiones en infraestructura, áreas comerciales, ocio y movilidad. Para desarrollar sus proyectos con más eficiencia, la Real Urbanismo evalúa a fondo todas las características de uso de la localidad elegida para cada emprendimiento y, en cada obra, mantiene:
Proyectos funcionales: con menor uso de recursos naturales, mejor aprovechamiento de los terrenos y de los materiales de construcción y menor generación de residuos;
Calidad técnica: la empresa cuenta siempre con profesionales con know how y altísimo conocimiento en técnicas constructivas;
Asesoramiento continuado: después de la venta del terreno, un equipo especializado se mantiene a disposición para asesorar al cliente sobre la mejor manera de aprovechar el terreno.
Respeto a la inversión del cliente: la Real Urbanismo aprecia tanto la realización personal como la financiera;
Compromiso con la naturaleza y sostenibilidad: una de las preocupaciones de la Real es evitar el manejo excesivo de plantas, a fin de causar el menor impacto posible en las áreas naturales próximas a los emprendimientos.
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